La humildad de un gobernante



Por: Carlos Martínez Márquez

‘’El secreto de la sabiduría, el poder y del conocimiento es la humildad’’. E.Hemingway

En el contexto cristiano, debe la humildad reconocerse como la virtud que nos impulsa a moderar el apetito desordenado de la propia excelencia, concediéndonos un conocimiento justo de nuestra pequeñez y miseria, en relación con Dios y el prójimo.
Es muy importante que’’aquellos que están en la carrera por el poder se enteren, que este rasgo evangélico de la humildad’’, es el que garantiza que el poder pueda cumplir la función, en una sociedad ordenada, dirigida al bien común.Entiendo que para que el poder sea servicio, debe de estar presente el poder de los pueblos.

El gobernante para ser íntegramente humilde, deberá ubicarse en la realidad y que consiste en andar con la verdad. Si el gobernante sabe escuchar, dirigir y orientar…estará en condición de llevar a su pueblo, al mayor bienestar posible, si es sensible a toda inquietud humana, tendrá mayor probabilidad de no herir,ni humillar a las personas; incluso a sus colaboradores más cercanos y amigos de
años ,que por sus convicciones y principios, creen que ha de ser lo más impoluto, para ejercer el poder con esa cualidad.El gobernante que no sabe escuchar, no está en condiciones de escucharse así mismo.A quienes se hacen llamar líderes políticos y no escuchan, les acompaña un’’doble discurso’’;piensan una cosa y hacen lo contrario.Hay gobernantes que les cuesta escuchar el sentir de a pie,y por tanto la inmensa oportunidad de valorar y compartir,se pierden a favor del desarrollo social, económico y cultural.Por eso insisto, de que el gobernante debe tener bien claro ese principio sencillo del saber escuchar: ’’Logramos escuchando, el milagro de
parir muchas ideas’’.

Los pueblos al igual que sus gobernantes deben tener ‘’in albis’’ sus mentes, para concebir con mesura y madurez, la importancia de establecer una línea horizontal de entendimiento. Alguien decía que para pararse y hablar en público se necesita mucho coraje, pero mucho más coraje se requiere, para sentarse a escuchar a la gente.

La reforma fiscal pone a pruebas ambas condiciones.

Comentarios

Eli Quezada ha dicho que…
Me gusta la prosa reflexiva en torno a la cosa pública a que nos tiene acostumbrados nuestro redactor estrella Carlos Martínez, de esta, nuestra revista, Prosa insular magazine...