Por Carlos Martínez Márquez
No solamente en los seres humanos se da el fenómeno del engaño, sino en primates y en el resto del reino animal.El engaño prevalece siempre, en el entorno social de grandes complejidades; ya sea en etapa evolutiva y en la capacidad de camuflaje muy bien elaborado-que procuran prosperar- mediante el efecto de confundir a su entorno o a sus depredadores.
Con relación a los primates, no estaría seguro, si dicho fenómeno es consciente de su conducta, si su pensamiento es reflexivo, o si sus actos obedecen a un plan bien concebido que si parece evidente… es que ambas destrezas la podemos enfocar en la ‘’inteligencia maquiavélica’’;capacidad que se desarrollan en diversas estrategias sociales-(ventajosas)-para sobrevivir.
La inteligencia maquiavélica induce a la necesidad, de dominar modos, cada vez más refinados, en cuanto a manipulación y defraudación en el medio social y como alternativa en lo político, cuya manifestación es, utilizada en la estrategia del disimulo, mentira y engaño tácticos.
Smith cita en su obra: Mentirosos natos.Mente y cerebro- que los seres humanos ‘’mienten’’ por naturaleza, con el paso de su desarrollo; creando en sí, lo que es la afición por el cambio de opiniones, cerrar tratos y confabularse con otros.
Estas consideraciones pueden afectar la ingenuidad del individuo, mediante el trastorno de la discromatopsia o daltonismo que padece el mas del 40% de la población de oposición al gobierno, cuya dudas le hacen ver un color turbio, desfigurado, por los tres periodos de gobiernos, que históricamente este pueblo le ha votado.Y sin embargo, desea que se le brinde otra oportunidad.
El sainete de lo mediático, nos pone a pruebas innecesarias, con la finalidad de que, si queremos trillar por el camino mas expedito al desarrollo y la continuidad de lo que está bien, corregir lo que esta mal y hacer lo que nunca se ha hecho, tenemos que vencerlos a puro votos. ¡Y por mucho!
Quiero concluir con una frase célebre del gran pensador Confucio-‘’La primera vez que me engañes, la culpa será tuya, la segunda, será mía’’.
Caalma61@gmail.com
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